- Escoge el tipo de grama que más se acomode a su gusto y a las condiciones de clima y suelo de donde se desea establecer.
- Elimina las malezas. Se recomienda aplicación de un herbicida sistémico una semana previo a la siembra. De esta forma evitamos que las malezas compitan con la grama que se establecerá.
- Pica muy bien el terreno. Procura remover los primeros 15 cms. de la superficie del suelo. De esta forma se facilita el buen desarrollo de las raíces y una muy buena oxigenación del suelo.
- Adiciona una mezcla en iguales proporciones de tierra negra y materia orgánica de buena calidad. Como fuente de materia orgánica se recomienda Compost Campo®. Las micorrizas son una buena opción para mejorar el desarrollo de raíces. Igualmente existen hormonas y bioestimulantes orgánicos que mejoran notablemente el proceso de germinación y de establecimiento de las gramas.
- Siembra la semilla “al voleo” teniendo en cuenta las densidades recomendadas para cada especie.
- Cubre con una ligera capa (3 a 5 mm) de tierra fina o arena.
- Aplica suficiente riego para que el terreno permanezca humedecido. Evita excesos y encharcamientos.
- La mayoría de les especies están germinando en un tiempo que varía entre 10 y 20 días. Algunos factores como humedad, temperatura y profundidad de siembra tienen que ver con este proceso.
- Un mes después de la germinación se puede comenzar el plan de fertilización. Se recomiendan inicialmente fertilizantes completos con alto contenido de fósforo para un adecuado enraizamiento. No olvides incluir los acondicionadores orgánicos y bioestimulantes.
- Recuerda siempre adquirir semilla certificada y con recientes fechas de empaque.
¡En Tierragro contamos con profesionales que te orientarán para que este proceso sea exitoso!
Agrónomo. José Nicolás Gómez Rodríguez
Tierragro.